La TEORÍA de los 3 CEREBROS de PAUL MACLEAN

Nuestro cerebro ha estado en constante evolución a través de más de 250 millones de años, volviéndose de esta manera, cada vez más complejo, adquiriendo funciones y habilidades nuevas.

Está conformado por diferentes zonas que, a lo largo del tiempo, han ido incorporándose una sobre otra.

Hay varias teorías sobre cómo nuestro cerebro regula los procesos mentales y sobre su funcionamiento. Gracias a los nuevos avances de la neurociencia se han podido descubrir nuevas formas de comprender a nuestro valioso y complejo cerebro.

Paul MacLean, médico centrado en el campo de las neurociencias, la psicología y la psiquiatría, en 1990 planteó una estructura dividida en tres sistemas cerebrales. Definió cada estructura y creó la conocida teoría del cerebro triúnico o cerebro triuno, la cual hace referencia a la existencia de tres tipos de cerebros, planteando así, una novedosa forma de reagrupar nuestro cerebro, dando nombre a estas secciones como:

El cerebro reptiliano, el cerebro límbico o emocional y el cerebro racional o neocórtex. Las tres están conectadas entre sí, pero a su vez funcionan de manera independiente y se envían información constantemente aunque cada una esté focalizada en una función especial.

Veamos más en profundidad cada una de ellas:

CEREBRO REPTILIANO:

Para la teoría de MacLean, es el cerebro más primitivo o antiguo de todos. Es la estructura que regula nuestras funciones vitales y las conductas instintivas relacionadas con la supervivencia (comer, beber, dormir) y de la especie (impulsos y relaciones sexuales). Dicho de otra manera, la función del cerebro reptiliano es actuar rápida e instintivamente para asegurarnos la supervivencia. Con lo que respecta a su anatomía, está ubicado en la zona baja del encéfalo : Tronco cerebral y prosencéfalo. Hablando desde lo psicológico, este cerebro se refiere al área en la que se controlan los niveles de energía del cuerpo y se busca el equilibrio, llamado homeostasis.

CEREBRO EMOCIONAL O LÍMBICO: 

Esta área apareció con los primeros mamíferos y se fue desarrollando por encima del cerebro reptiliano. Está considerado el centro de las emociones.

Es quien se encarga de producir y generar emociones en nuestro sistema nervioso. Tiene una función muy adaptativa, produciendo respuestas emocionales y generando un aprendizaje muy significativo en las experiencias. Nuestros sistemas de memoria, motivación, activación y atención suelen funcionar de una manera más productiva cuando se ven influenciados por las emociones. Esta estructura está formada a su vez por el tálamo, la amígdala, el hipotálamo, los bulbos olfatorios, la región septal y el hipocampo. Coincidiendo así, con lo que hoy en día definimos como sistema límbico. Este, al igual que el cerebro emocional, es el área que se encarga de regular las emociones y articular la manera en la que las expresamos.

CEREBRO RACIONAL O NEOCÓRTEX:

Está situado en la zona más superficial del encéfalo, conforma el 90% de la corteza cerebral y se extiende en forma de pliegues y circunvoluciones.

Desde la perspectiva de esta teoría, esta parte de nuestro cerebro es la responsable del procesamiento cognitivo y de la toma de decisiones razonadas y lógicas. También es conocido como materia gris, sin embargo, el neocórtex está formado por varias estructuras encefálicas, entre ellas, el hemisferio izquierdo y el hemisferio derecho de la corteza cerebral.

Según MacLean, el ser humano es el único organismo que tiene completamente desarrollado el neocórtex, ya que algunas de las habilidades que nos brinda esta área cerebral son las capacidades intelectuales, lógicas y la toma de decisiones racionales, y también nos ayuda en los procesos de autoconciencia, reflexión y organización.

Para comprender la funcionalidad de estas áreas concretamente y a modo de ejemplo, podemos decir que se activa el cerebro reptiliano cuando algo nos genera miedo y nos asustamos. Activamos el cerebro límbico cuando algo nos enoja y reaccionamos frente a eso. Por último, actúa el neocórtex cuando valoramos y recapacitamos sobre nuestra manera de actuar.

Esta teoría es considerada muy notable ya que relaciona áreas cerebrales con funciones mentales concretas y gracias a ella y otras tantas, hoy por hoy se desarrollan algunas disciplinas como la neuropsicología.

A la vez, cabe destacar que el modelo de MacLean, resulta un poco simplista con toda la nueva información que actualmente tenemos. Gracias a los nuevos métodos en neuroimagen, se ha logrado examinar que nuestro apreciado cerebro no está sólo determinado por partes como si habláramos de un simple rompecabezas, ya que nuestro SISTEMA NERVIOSO es considerado una red compleja de células neuronales que trabajan como aliadas, siendo parte de una singular conjunción.

*La información de este artículo fue extraída de varias fuentes.